Elegir mal el merchandising puede afectar la imagen de tu marca. Te contamos los errores más frecuentes y cómo evitarlos para lograr una acción efectiva y memorable.
El merchandising corporativo puede ser una herramienta poderosa para fidelizar clientes, motivar equipos o posicionar tu marca. Pero cuando se elige mal, el resultado puede ser contraproducente. En esta nota te compartimos los errores más comunes que vemos a diario y cómo podés evitarlos.
- Elegir productos que nadie va a usar Un llavero, un vaso térmico, un destapador… Si no tiene utilidad real para quien lo recibe, probablemente termine en un cajón (o en la basura). Optá por productos funcionales, atractivos y coherentes con el estilo de vida de tu audiencia.
- No pensar en el público destinatario Cada acción tiene un objetivo y un destinatario distinto: no es lo mismo regalar a empleados que a clientes, o a ejecutivos que a operativos. Adaptá el producto al perfil del receptor, su contexto y preferencias.
- Dejarlo para último momento Uno de los clásicos. Llega diciembre y todo el mundo quiere kits personalizados en 5 días. Resultado: menos opciones, más costos, y alto riesgo de que no llegue a tiempo. Planificá con anticipación para tener más margen y mejores resultados.
- Elegir solo por precio «Dame lo más barato» suele ser el primer paso para un resultado pobre. Un producto de baja calidad da mala imagen. Invertí en opciones equilibradas entre precio, utilidad y percepción. A veces, menos cantidad pero más calidad, vale más.
- No personalizar el mensaje El logo no es todo. Un mensaje, una etiqueta o una presentación pensada para el momento hacen que el regalo tenga sentido. Esa personalización emocional es la que genera recordación positiva.
- Ignorar la logística: De nada sirve tener los productos si no se entregan bien. Coordiná embalaje, transporte y fechas con tiempo. Pensá también si necesitás envíos individuales, kits por sucursal, o retiros parciales.
El merchandising bien ejecutado puede ser una estrategia de alto impacto. Pero mal planificado, es solo gasto. Evitá estos errores comunes y hacé que tu próxima acción sea recordada por lo que suma, no por lo que faltó.
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